La Odontología General trata los problemas primarios relacionados con la boca, dientes y otras estructuras. Normalmente, suele ser el primer contacto del paciente con el odontólogo, que le realiza un diagnóstico inicial, resuelve los problemas de restauración de caries y deriva al especialista el tratamiento que el paciente requiere.
Los principales tratamientos que realiza la odontología general son: endodoncias, bruxismo, extracciones, odontología conservadora: obturaciones (empastes), incrustaciones, reconstrucciones de piezas dentales, sellado de fisuras, restauración de caries, etc.
Las caries son zonas dañadas de forma permanente en la superficie de los dientes que se convierten en pequeñas aberturas u orificios. Las caries se producen a causa de una combinación de factores, como bacterias en la boca, ingesta frecuente de bebidas azucaradas y limpieza dental deficiente.
SINTOMAS
FACTORES DE RIESGO
El tratamiento de endodoncia consiste en eliminar el nervio del diente y sus vasos sanguíneos y por consiguiente la vitalidad de la pieza dental dañada. Se realiza bajo anestesia local, es indoloro y permite reconstruir y conservar las piezas dentales que de otra forma habría que extraer. De esta manera las piezas podrán seguir cumpliendo sus funciones de masticación y estética.
La detección y tratamiento tempranos evitan la extracción del diente natural y la pérdida del hueso que lo soporta, a la vez que elimina las infecciones dentales y acaba con el dolor.
Representación gráfica de la infección
La pulpa dental puede inflamarse como consecuencia de distintos factores, y en última instancia puede llegar necrosarse o morir.
CAUSAS
Es una enfermedad bucal generalmente bacteriana que provoca inflamación y sangrado de las encías, causada por los restos alimenticios que quedan atrapados entre los dientes.
Las causas más habituales en el origen de la gingivitis son: mala higiene dental, durante el embarazo (cambios hormonales que aumentan la sensibilidad de las encías), diabetes no controlada, dientes mal alineados, los bordes ásperos de las obturaciones y la aparatología oral mal colocada o contaminada (correctores dentales, prótesis, puentes y coronas).
Si la gingivitis no se trata puede avanzar a periodontitis, fase en la que la capa interna de la encía y el hueso se separan de los dientes, formándose bolsas. En éstas, que son espacios pequeños entre los dientes y las encías, se recogen los desechos y pueden infectarse.
El sistema inmune del cuerpo combate las bacterias a medida que la placa se extiende y crece por debajo de la línea de las encías.
CÓMO DETECTAR LA PERIODONCIA
TRATAMIENTOS
RASPADO Y ALISADO RADICULAR
El curetaje es un tratamiento que se realiza para eliminar el sarro o placas bacterianas que se encuentran acumuladas entre la encía y el diente. Las enfermedades periodontales producen infección, hinchazón y sensibilidad de la zona que dependerá de la gravedad de la enfermedad. Por lo general, si la infección se ha cogido a tiempo el curetaje puede ser realizado sin anestesia, pero si está más avanzado, la zona es mucho más sensible por lo que se usa anestesia para poder limpiar de una forma más profunda la encía y evitar cualquier molestia al paciente.
CIRUGIA PERIODONTAL
La cirugía periodontal es una fase del tratamiento de las enfermedades de la encía que permite eliminar las bacterias de las zonas más profundas de la bolsa periodontal y corregir los defectos anatómicos producidos como consecuencia de la enfermedad.
La intervención consiste en separar y levantar el colgajo -mucosa que rodea el hueso del diente-, para que el profesional consiga la suficiente visión sobre el área. Así, podrá retirar todo el sarro acumulado, limpiando y desinfectando la zona para, después, poner los puntos de sutura.
El bruxismo se define como un hábito oral inconsciente de apretar, rechinar y hacer sonidos masticables rítmicos y no funcionales con los dientes, movimientos que no forman parte de la función masticatoria y que conducen a un trauma oclusal. Como actividad parafuncional oral, no está relacionada con las funciones fisiológicas normales, como el habla, la respiración, la masticación y la deglución.
La prevalencia del bruxismo está relacionada con el estrés, los cambios en el estilo de vida, la mala alimentación y los problemas de sueño.
Esta parafunción se suele descubrir cuando el paciente acude por primera vez al dentista. Uno de los signos clínicos más prominentes es el desgaste anormal de los dientes, causado por apretar y rechinar los dientes.
TRATAMIENTO
Uno de los mejores tratamientos para el bruxismo nocturno es usar un protector bucal ajustado por el odontólogo. El protector bucal o férula de descarga puede ayudar a proteger los dientes de daños y reducir los efectos del rechinamiento en músculos, tejidos blandos y huesos.